Deja de estarte quejando. Deja hacerte el pobrecito. Deja de decir que no tienes, que no te alcanza, que ganas poco. Porque si vives declarando pobreza, pobreza es lo que vas a tener.
Además, quítate ese mal hábito de hacerte la víctima. Así nunca vas a mejorar.
Lo primero que debes cambiar, es tu AUTO-CONCEPTO: No eres pobre, sólo estás quebrado o sin plata. El dinero va a llegar, lo vas a conseguir.
Pero primero debes conseguir un nuevo estado mental y dejar de quejarte. Recuerda que tu estado financiero sólo es un reflejo de tu estado mental…
Así que si en tu mente ves dinero, ves riqueza, ves oportunidades, ves progreso, eso pronto se va a ver reflejado en tus bolsillos.
Lo segundo a mejorar, es tu valoración. No te conformes con pequeñeces, sino que ve por lo grande.
Lo tercero a mejorar, es tu lenguaje. Cambia tus palabras. Hay personas que todo el día andan hablando de enfermedades o de que no les alcanza el dinero.
Les preguntas cómo estás, y contestan, casi sin ganas: "Aquí, más o menos", "pasándola." "aquí sin nada, al borde de la indigencia". Otros dicen: "no se gana pero se goza."
Si te das cuenta, aquellas son expresiones que se convierten en semillas de más necesidad.
Cambia tus palabras, pásate al carril de la riqueza, y cuando te pregunten cómo estás, contesta con actitud: "Al millón". "Aquí, avanzando a toda máquina". "Excelente". "Positivo". Verás cómo tus palabras crean una nueva vibración.
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