Para que entiendas la pregunta, déjame contarte algo:
Marta y Beatriz eran dos hermanas, ya viudas, que vivían en la misma casa. Marta era una de esas personas que siempre se pasaban la vida quejándose. Beatriz, por su parte, escuchaba serenamente a su hermana, sin objetar nunca.
Día tras día se repetía la misma situación. Marta se quejaba. Beatriz escuchaba en silencio.
Un día recibieron una visita de una amiga, que después de escuchar tantas quejas, se llenó de indignación. Preguntó entonces a Beatriz cómo podía convivir con Marta, que se pasaba la vida quejándose. Beatriz respondió: "No le hago caso. La cosa no es conmigo".
Y es que, amigo mío, ellas vivían las dos solas, pero Beatriz no asumía las quejas de su hermana, pues sabiendo que siempre estaba malhumorada, solo podía quejarse tanto contra ella misma.
Así que cuando las cosas o las personas te agredan con la intención de arrancarte la paz, piensa y di: "NO ES CONMIGO".
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