A USTEDES PADRES DE FAMILIA LES DIGO:
Todos los niños merecen un hogar amoroso, tranquilo, y no un campo de batalla.
Revisemos, como adultos, lo que estamos creando dentro de casa, la forma en que nuestros hijos nos ven, nos escuchan, nos imitan...
Nadie es perfecto, eso es definitivo. Todos tenemos problemas y luchas internas o con nuestra pareja…
Pero es nuestra responsabilidad solucionar esos asuntos. Es nuestra responsabilidad cuidar a nuestros niños...
Que tu hogar sea su lugar seguro, su lugar preferido...
.
.